El Evangelio
Bienvenidos a Abre mis Ojos. Abre mis Ojos está patrocinado por la Iglesia de Dios Cristiana y Bíblica en donde estamos dedicados a restaurar el Cristianismo original para hoy. Mi nombre es Eduardo Elizondo y me da mucho gusto saludarlos en esta edición de Abre mis Ojos. El día de hoy vamos a hablar acerca del Evangelio.
Quizás usted haya escuchado la palabra Evangelio, pero ¿qué significa la palabra Evangelio? En realidad, la palabra Evangelio no está más que solo una vez en el Antiguo Testamento y muchísimas más veces en el Nuevo Testamento. ¿Pero qué es el Evangelio? ¿En qué consiste? Vamos a hacer un análisis el día de hoy de lo que es el Evangelio, lo que significa, que es lo que conlleva el Evangelio.
Hemos oído hablar del Evangelio del Reino de Dios, pero hay muchas otras formas en la que esta descrito el Evangelio. Para comenzar vamos a la definición de Evangelio. En realidad, el significado bíblico de Evangelio se refiere a anunciar la buena noticia. En la antigüedad, ni siquiera se refería esta palabra a alguna religión. Por el contrario, se utilizaba solamente cuando un mensajero iba a llevar buenas noticias. Eso es lo que significa Evangelio, la buena noticia.
Ahora, ¿cuál es la buena noticia en la Biblia? ¿Cuál es la buena noticia en la Palabra de Dios?
Nosotros vamos a ver en el Nuevo Testamento que hay muchas formas de describir este Evangelio. Podemos ver que se describe como el Evangelio del Reino o el Evangelio del Reino de Dios, se describe también como el Evangelio de Jesucristo o el Evangelio de Jesús, el Evangelio de paz, Evangelio del Señor Jesús, también está en otras escrituras el Evangelio de la gracia de Dios, el Evangelio de Dios, el Evangelio de tu salvación, el Evangelio de nuestro Señor Jesucristo y el Evangelio de la gloria del bendito Dios.
Esas son las diferentes definiciones que se le da a esta palabra Evangelio. Nosotros sabemos obviamente también como marco de referencia, que los primeros cuatro libros del Nuevo Testamento se les llama Evangelios, que son realmente la vida de Jesucristo nuestro Señor. Ahí están en Mateo, Marcos, Lucas y Juan todas las acciones y las palabras directas de nuestro Señor Jesucristo cuando Él caminó en la tierra. ¿Pero cuál es este Evangelio que Él vino a dar, estas buenas nuevas que Él vino a dar? Porque hay iglesias que dicen que realmente Él es el Evangelio, y en realidad tienen razón, hay otras iglesias que dicen que es solamente Él, hay otras iglesias que dicen que es el mensaje que Él trajo solamente, la promesa de un reino venidero, la promesa de la resurrección, promesas de vida eterna, de salvación—como ya analizamos en un episodio anterior acerca de la salvación, de lo que necesitamos ser salvos.
Pero esta palabra Evangelio es en realidad, conlleva muchísimas cosas, porque son las buenas nuevas, ¿pero las buenas nuevas de qué? ¿Se trata acaso solamente de la vida y obra de Jesucristo? ¿O se trata del mensaje que vino a traer? ¿O se trata de algo todavía muchísimo más grande que esto, muchísimo más grande de lo que quizás nos habíamos imaginado? La respuesta la vamos a estudiar el día de hoy en este episodio de Abre mis Ojos.
Para comenzar hay que tomar la perspectiva desde el principio, y no incluso desde la creación sino mucho antes incluso de la creación. Ahora, en Apocalipsis 13:8, es interesante que al final de la Biblia, en el último libro se nos da una pista muy importante acerca del Plan de Dios y desde cuándo comenzó este plan. Aquí en este capítulo de Apocalipsis 13 está hablando acerca de la bestia venidera, y obviamente hay ahora muchos rumores y muchas personas hablando de la bestia, hablando del número de la bestia y de la marca de la bestia.
Aquí vamos simplemente a hacer un paréntesis en esta conversación de lo que estamos hablando del Evangelio, porque dice, habla acerca de la bestia, y para entrar en contexto y después traerlo de nuevo a lo que estamos hablando acerca del Evangelio de Dios.
En el versículo 8 nos dice: “Y todos los que viven sobre la tierra lo adorarán, cuyos nombres no han sido escritos en el libro de vida del Cordero muerto desde la fundación del mundo.” Y esto nos está hablando entonces en el libro de Apocalipsis, capitulo 13, y está hablando de la bestia, y también hablando de adorar a la bestia. Pero vamos a enfocarnos en la última parte de este versículo, que nos dice no solamente que “...los que viven sobre la tierra lo adorarán, cuyos nombres no han sido escritos en el libro de vida del Cordero muerto desde la fundación del mundo.”
Desde que el mundo fue fundado, el Cordero ya había sido muerto, o como dice en otras versiones, inmolado. En realidad, el plan de salvación que Dios el Padre y nuestro Señor Jesucristo tienen comenzó desde la fundación del mundo, que fue antes de la re-creación. En otro episodio vamos a explicar un poco más a fondo esto y lo que pasa entre Génesis 1 y Génesis 2. Pero por ahora vamos a enfocarnos en lo antiguo que es este plan de Dios porque el Cordero, sabemos, es Cristo Jesús, y es muerto desde la fundación del mundo. Estaba determinado—determinado—que hubiese un salvador.
Entonces una de las partes que conlleva este mensaje, estas buenas nuevas, es que hay un plan de salvación para la humanidad, un plan de salvación para usted y para mí.
En Isaías Dios nos dice lo siguiente, en Isaías 61, versículo 1, que es el único versículo en el Antiguo Testamento donde se usa la Palabra Evangelio. Dice: “ “El Espíritu del SEÑOR Dios está sobre Mí porque el SEÑOR Me ha ungido para predicar el Evangelio a los pobres, Me ha enviado para vendar al quebrantado de corazón, para proclamar libertad a los cautivos, y la apertura de la prisión a aquellos que están atados; para predicar el año aceptable del SEÑOR y el día de venganza de nuestro Dios; para consolar a todo el que llora; para designar a aquellos que lloran en Zión, dándoles belleza por cenizas, el aceite de gozo por llanto, el manto de alabanza por el espíritu de letargo; para que puedan ser llamados árboles de justicia, la plantación del SEÑOR, para que Él pueda ser glorificado.” ”
Esta obviamente es una profecía acerca del Mesías quien iba a venir. Y Él obviamente tomó el rollo, sabemos, se nos dice en los Evangelios que Jesucristo tomó el rollo en la sinagoga y empezó a leer esta misma escritura acerca de Si mismo, no la leyó en su totalidad, simplemente la leyó realmente hasta la mitad del versículo 2, se paró Jesucristo nuestro Señor en la sinagoga y dijo que el Espíritu del Señor estaba sobre Él. Y vamos analizar un poquito lo que está hablando aquí:
1. “...para predicar el Evangelio a los pobres,...” Las buenas nuevas a los pobres: Que no van a ser pobres para siempre
2. A “...vendar al quebrantado de corazón,...” Al que está herido: Que Él lo va a sanar
3. “...para proclamar libertad a los cautivos,...” a todos los que están presos, y no presos solamente en la prisión literalmente, sino a los que están presos al pecado, presos a sus impulsos, presos a sus ideas, presos a la esclavitud de este mundo.
4. “...y la apertura de la prisión a aquellos que están atados;...” Atados con cuerdas de pecado, con cuerdas de maldad, con cuerdas de iniquidad, de hipocresía.
5. “...para predicar el año aceptable del SEÑOR...” Y ahí se detuvo porque lo que viene: “...el día de venganza de nuestro Dios; para consolar a todo el que llora;...” y para llevar a cabo todo lo demás en el resto del versículo 2 y versículo 3 se refiere a un tiempo futuro. El Evangelio incluye todo esto, todo esto.
El día de hoy obviamente no podemos cubrir absolutamente todo lo que es el Evangelio pero por lo menos queremos empezar a analizar un poquito más lo que es el Evangelio para entender esta palabra, para tener el concepto de lo que es las buenas nuevas y empezar un poquito a desempacar lo que son estas buenas nuevas, que es lo que conlleva, porque hay un plan de salvación para toda la humanidad
Ahora, vamos a ver que esto conlleva una parte muy, muy importante: Es el amor. El amor de Dios es parte esencial del Evangelio porque Cristo vino a declarar al Padre, a Dios el Padre. Y Dios el Padre y Jesucristo, Ellos son amor, Ellos son amor, y es una prueba de todo Su amor lo que están llevando a cabo en el mundo.
Ahora, este no es el único día de salvación, porque si lo fuera seria entonces un fracaso muy grande, porque la mayoría de las personas no están siendo salvas ahora, no están escuchando el mensaje de salvación ahora ni están aceptando a Cristo ni están viniendo a Él ni están cambiando sus vidas. Eso tenemos que aceptarlo como realidad, porque no podemos tapar el sol con un dedo, los resultados nos dicen que eso no está sucediendo ahora y no debemos mentirnos a nosotros mismos ni tampoco torturarnos a nosotros mismos, Dios pensó en todo desde el principio porque Dios es amor.
El Salmo 146, en el versículo 5 nos revela un poco acerca del amor de Dios, del corazón que tiene, la ternura que tiene Dios para con toda Su creación. Y dice: “Feliz es quien tiene al Dios de Jacob para ayuda suya, cuya esperanza está en el SEÑOR su Dios, Quien hizo los cielos y la tierra, el mar y todo lo que está en ellos; Quien mantiene verdad para siempre;” Y aquí es donde empieza el Evangelio, empieza con la creación de los cielos y la tierra, del mar y todo lo que está en ellos. Obviamente ya como vimos, el plan empezó mucho antes con el sacrificio por el pecado, pero empieza en realidad con la re-creación también, porque aquí es donde crea los cielos y la tierra y todo lo que está en ellos, esa fue la fundación del mundo, eso no significa que fue cuando hizo a Adán y Eva y a los animales y a todo lo demás.
Pero dice: Quien es “Quien mantiene verdad para siempre;” Y continúa este plan de salvación, no se queda en la creación, no se queda en el plan de salvación del sacrificio de Cristo.
Dice, versículo 7: “Quien hace justicia para el oprimido; Quien da comida al hambriento. El SEÑOR deja suelto a los prisioneros; el SEÑOR abre los ojos del ciego, el SEÑOR levanta a aquellos que están doblegados; el SEÑOR ama al justo; el SEÑOR preserva los extranjeros; Él sostiene al huérfano y la viuda, pero el camino del malvado Él voltea al revés.” Y esto nos dice todas las obras que Dios está llevando a cabo que son parte de Su Evangelio, y si bien no todas se están llevando a cabo en este tiempo y muchas de ellas se llevarán a cabo en el futuro, este es el plan de Dios, este es el Evangelio y las buenas nuevas: Que Dios no solamente hizo los cielos y la tierra, el mar y todo lo que hay en ellos, sino que Él hace justicia al oprimido, Quien da comida al hambriento, Quien deja suelto a los prisioneros, Quien abre los ojos del ciego, Quien levanta a los que están doblegados, son buenas nuevas. Dios es amor y quiere que todos lleguemos a ser plenos pero en Él y no necesariamente el día de hoy. Y Él dice que trastorna el camino del malvado para llegar al final, al punto final como esta expresado en este mismo Salmo, en el versículo 10: “El SEÑOR reinará para siempre, incluso tu Dios, Oh Zión, a todas las generaciones. ¡Oh alaben al SEÑOR!” Porque esta es la parte del Evangelio que habla acerca también de Su Reino venidero. Como también ya mencionábamos, es también el Evangelio del Reino o el Evangelio del Reino de Dios.
El Salmo 147 y versículo 3 también nos da aún más información acerca del corazón de Dios, de lo que Dios realmente tiene en mente para toda la humanidad, para toda la humanidad, pero no necesariamente al mismo tiempo, no necesariamente ahora, porque como mencionábamos, de ser así ha sido un fracaso tremendo, pero Dios no ha fracasado ni fracasara, Sus planes se llevaran a cabo.
En el Salmo 17, en el versículo 2 dice: “El SEÑOR edifica Jerusalén; Él reúne los marginados de Israel. Sana a los quebrantados de corazón y venda sus heridas.” Si usted ha sido quebrantado de corazón, si a usted lo han traicionado, le han fallado, le han mentido, ha sufrido, ha sido quebrantado, ha sido desechado, ha sido rechazado, si usted ha tenido dolor en su corazón, por supuesto que alguna de estas cosas ha sucedido en su vida, Dios quiere sanarlo, Dios quiere vendar sus heridas, Dios quiere restablecerlo completamente para que usted llegue a conocerlo a Él directamente, para que no sea algo a lo lejos, que no sea algo en lo abstracto sino que sea directamente en su corazón, que usted conozca a Dios el Padre y a Jesucristo porque Ellos son amor... Ellos son amor y quieren hacer esto en usted si usted cede, si usted los busca, Ellos le responderán.
El Evangelio también, como ya mencionábamos, implica la creación. Y de nuevo, vamos al final de la Biblia para ver algo de lo que pasó en el principio y por qué es el Evangelio tan extenso, que envuelve absolutamente todo lo que se lleva a cabo en la tierra desde que fue creada.
Apocalipsis 14 y versículo 6 dice: “Y vi otro ángel volando en medio del cielo, teniendo el evangelio eterno para proclamar a aquellos que viven sobre la tierra, y a toda nación y tribu e idioma y gente;” Muy interesante lo que dice aquí porque está hablando del Evangelio eterno y lo va a proclamar a todos aquellos que viven sobre la tierra y no excluye absolutamente a nadie, “... a toda nación y tribu e idioma y gente,” No importa que sean de las partes orientales del mundo, no importa, también los incluye, incluye a toda nación y tribu, a todo idioma y a toda la gente.
Pero vamos a ver lo que dice en el versículo 7: “Diciendo con una gran voz, “Teman a Dios, y denle gloria a Él, porque la hora de Su juicio ha venido; y adoren a Quien hizo el cielo, y la tierra, y el mar, y las fuentes de agua.” ” Entonces el ángel está proclamando lo que nosotros estamos estudiando el día de hoy, lo que es el Evangelio: Que tenemos que darle a Él la gloria y la honra porque Su juicio ha venido y está a punto de venir y que adoremos a quien hizo el cielo, la tierra, el mar y las fuentes de agua. ¿Por qué? Porque Él es Dios creador. ¿Por qué? Porque Él quiere vendar nuestras heridas, porque Él quiere sanarnos, Él quiere cambiarnos, ese es Su plan.
Parte del Evangelio también envuelve Su Palabra porque nosotros tenemos la Biblia, la Palabra completa de Dios. En realidad el Evangelio lo incluye todo, está en toda la Palabra de Dios desde el principio hasta el final. Nos dice desde la creación del mundo hasta el final del mundo.
Sabemos nosotros que la Palabra de Dios es Jesucristo, como ya hemos estudiado en otro episodio de Abre mis Ojos acerca de quién es Dios.
En Juan 1 y versículo 14 dice lo siguiente: “Y la Palabra se hizo carne, e hizo tabernáculo entre nosotros (y nosotros mismos vimos Su gloria, la gloria como del único engendrado con el Padre), lleno de gracia y verdad.”
Versículo 15: “Juan testificó concerniente a Él, y proclamó, diciendo, “Este era Aquel de Quien dije, ‘El que viene detrás de mi tiene precedencia sobre mi porque Él era antes de mí.’ ” Y de Su plenitud todos hemos recibido, y gracia sobre gracia. Porque la ley fue dada a través de Moisés, pero la gracia y la verdad vinieron a través de Jesucristo.” Entonces el Evangelio incluye Su Palabra, porque la Palabra se hizo carne y habitó entre nosotros y por eso es el Evangelio de Jesucristo o el Evangelio de Jesús, porque Su Palabra a través de la cual Dios se ha comunicado con el hombre se hizo carne y habitó entre nosotros y vino a traernos las buenas nuevas de Su Reino, de Su plan, de quien es Él, de quien es Su Padre, de lo que están llevando a cabo en el mundo.
Y realmente la ley vino a través de Moisés y después, a través de Jesucristo fue añadida la gracia y la verdad. Entonces tenemos la ley, la gracia y la verdad que nos han sido dadas por la Palabra de Dios. Pero tiene un propósito maravilloso Dios para con toda la humanidad, toda la humanidad va a recibir una oportunidad de salvación y no va a ser en secreto, cada uno de los seres humanos que haya existido jamás tendrá una oportunidad de conocer al verdadero Dios, a nuestro creador, a Dios el Padre y a Su Hijo Jesucristo a través del cual fueron hechas todas las cosas. Este es Su propósito, este es parte del Evangelio, el propósito de Dios.
Isaías 55, versículo 10 lo declara de la siguiente manera: “Porque como la lluvia cae, y la nieve de los cielos, y no regresa allá, sino riega la tierra, y la hace dar a luz y brotar, y da semilla al sembrador y pan al que come; así será Mi Palabra, la cual sale de Mi boca; no regresará a Mi vacía, sino que logrará lo que quiero, y ciertamente hará lo que Yo la envié a hacer, porque ustedes saldrán con gozo, y serán sacados con paz; las montañas y colinas exclamarán delante de ustedes en canción, y todos los árboles del campo aplaudirán sus manos; en lugar de la espina, el árbol de abeto saldrá; y en lugar de la zarza, el árbol de mirto saldrá; y será para el SEÑOR por un memorial, por una señal perpetua la cual no será cortada.” ”
El Evangelio de Dios incluye Su propósito, el propósito de que va a llevar a cabo todo lo que Dios ha determinado desde el principio. Dios ha determinado salvar a la humanidad, al que quiera ser salvo, al que se acerque a Dios, al que lo busque y se humille y esté dispuesto a servirle, a conocerle y amarle como dice en el primer mandamiento “con todo su corazón, con todo su alma, con toda su mente, con todas sus fuerzas.”
El último aspecto que vamos a hablar el día de hoy en este episodio acerca del Evangelio, es el Reino de Dios porque también es el Evangelio del Reino o el Evangelio del Reino de Dios. ¿Cuál es este Reino de Dios? Vamos a ver en una Escritura donde está hablando el profeta Daniel en el libro de Daniel capítulo 2 versículo 44. No sé si usted está familiarizado con la estatua del rey Nabucodonosor. En Daniel 2 puede leer la historia. Esta una estatua muy grande, en el sueño de Nabucodonosor, con una cabeza de oro y con unos pechos y brazos de plata, después con un vientre de hierro, después las piernas de hierro y los pies mezclados de barro con hierro. Y después, al final de esto, porque nos está revelando en verdad la historia de los reinos poderosos de la tierra y después en otro episodio ya estudiaremos esta imagen más en detalle.
Pero por ahora vamos al final de la historia. En el versículo 44 dice: “Y en los días de estos reyes, el Dios del cielo establecerá un reino el cual nunca será destruido. Y el reino no será dejado a otra gente, sino que romperá en piezas y consumirá todos estos reinos, y permanecerá para siempre.” Este es el Reino de Dios. El Reino de Dios que durará por siempre y como promesa tenemos también testificado en la Palabra de Dios, al final, todo lo que va a suceder, todo el propósito de Dios y en lo que llega a culminar.
En Apocalipsis 21:1, Dios nos dice lo siguiente: “Entonces vi un cielo nuevo y una tierra nueva; porque el primer cielo y la primera tierra estaban desaparecidas, y no había más mar. Y yo, Juan, vi la santa ciudad, la Nueva Jerusalén, bajando de Dios desde el cielo, preparada como una novia adornada para su esposo. Y escuché una gran voz desde el cielo decir, “He aquí, el tabernáculo de Dios es con los hombres; y Él vivirá con ellos, y ellos serán Su pueblo; y Dios mismo estará con ellos y será su Dios.”
Y este es el propósito de Dios. Este es el propósito de Su plan, de Su Reino, el tener un cielo nuevo y una tierra nueva, porque el primer cielo, este cielo y esta tierra van a desaparecer, esta testificado en el libro de Apocalipsis y no va a haber mar pero va a haber una nueva Jerusalén bajando desde el cielo, preparada, como una novia para Su esposo y en realidad el Tabernáculo de Dios estará con los hombres como estuvo en el Jardín del Edén, como fue Su plan desde el principio.
Versículo 4: “Y Dios borrará toda lágrima de sus ojos; y no habrá más muerte, o pena, o llanto, ni habrá más dolor, porque las cosas anteriores han desaparecido.”” Este es el Evangelio del Reino de Dios, este es Evangelio de Jesucristo, estas son las buenas nuevas que tiene Dios preparado para todos los que lo aman, para todos los que lo buscan, para todos los que estamos aquí pidiéndole que abra nuestros ojos, y que nos enseñe las maravillas de Su Palabra, que nos conceda entender este Evangelio, que nos conceda entender Su plan y las buenas nuevas.
¡Este es el Evangelio de Dios!